Estambul es un destino perfecto como vacaciones debido a que es una ciudad que nos permite disfrutar de su cultura, su gastronomía y sus monumentos.

Estambul es una ciudad muy visitada por personas de diferentes lugares del mundo debido a su importancia histórica ya que fue el enclave geográfico de tres imperios: el romano, otomano y bizantino.

En esta guía os mostramos qué podréis hacer en Estambul y toda la información necesaria para no tener ningún problema y disfrutar de vuestra estancia allí.

Santa Sofía es una antigua catedral bizantina la cual fue construida entre los años 532 y 537 d.C, durante el mandato de Justiniano, reconocida también como Ayasofya o Hagia Sophia. Es hoy el principal símbolo turístico de Estambul de Turquía. En 1935 fue transformada en museo y entre 1204 y 1261, Santa Sofía fue la iglesia del Papa. Desde principios de 1453 fue convertida en mezquita por el Imperio Otomano. Ya como mezquita los otomanos dotaron al edificio de sus cuatro espectaculares minaretes, una madrasa (escuela de teología) y un comedor público.

Los turistas pueden visitar la iglesia y contemplar sus mosaicos bizantinos, su historia y su arquitectura que une oriente y occidente y la cual fue convertida en Patrimonio de la Humanidad en el año de 1985.

La Mezquita Azul llamado también como mezquita del Sultán Ahmed Camii, es el templo religioso más espectacular de Estambul. Fue construida por el Sultán Ahmed I entre 1609 y fue inaugurada durante el mandato de Mustafá I en 1617. Recibe su nombre del color brillante de sus 20.000 azulejos de cerámica de Iznik que adornan la cúpula y la parte superior de la mezquita.

La Mezquita Azul cuenta con 6 minaretes y su cúpula central tiene 23 metros de diámetro y 43 metros de altura. Está separada de la iglesia de Santa Sofía por el famoso Hipódromo romano de Constantinopla.

El Palacio Topkapi es un antiguo palacio muy interesante de Estambul el cual refleja el desarrollo del arte turco durante la época imperial en Estambul entre 1465 y 1853. Fue convertido en un museo en 1924 por el mandato de Ataturk para conocer la vida de los antiguos sultanes que gobernaron su imperio hasta mediados del siglo XIX. El Harén era el lugar donde residía el Sultán, su familia y un conjunto de concubinas y el fascinante tesoro real que acumuló el imperio otomano, lo cual lo ha hecho mundialmente conocido.

Palacio Dolmabahçe es un impresionante palacio emplazado en Estambul de estilo neobarroco (europeo) en el que se trasladaron los sultanes del Imperio Otomano desde 1856 hasta 1924.

Fue construido entre los años de 1843 y 1856 por el mandato del Sultán Abdülmecid imitando el estilo de los palacios de Louvre de París y Buckingham de Londres. En su construcción intervinieron cuatro arquitectos del Departamento Real de Arquitectura del Imperio Otomano. El estilo del palacio es una mezcla de los estilos occidentales barroco, rococó y neoclásico con el estilo tradicional otomano. Con una fachada impresionante de mármol de más de 600 metros con vistas al Bósforo y una superficie total de 15.000 metros cuadrados, además de tener 285 habitaciones, 43 salas, 68 lavabos y 6 baños turcos.

Gran Bazar. Se trata de uno de los mercados más populares y grandes del mundo. Cuenta con más de 50 calles y unas 3,600 tiendas para hacer compras de joyas, artesanía, ropa tés especias, cereales, dulces, etc.

El Bósforo es el estrecho que conecta el Mar de Mármara del Mar Negro, dividiendo Estambul en dos partes: la europea y la asiática. Tiene una longitud total del estrecho de 30 kilómetros y una anchura máxima desde los 700 metros hasta los 4 kilómetros de la entrada al Mar Negro.

Para cruzar el estrecho hay dos puentes principales: el Boğaziçi y el Fatih Sultan Mehmed, pero el cruce en ferry de las líneas marítimas turcas sigue siendo habitual.

El Crucero por el Bósforo es uno de los paseos ineludibles, para los que viajen a Estambul en grupos organizados. Durante el recorrido se puede encontrar numerosos palacios como Ciragan ,Bylerbeyi, y Dolmabahçe).

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