En las principales ciudades de Rusia se disfrutan tres meses de verano. Con la existencia de los cambios climáticos en todo el mundo, es muy difícil preveer el tiempo en las ciudades en los meses de verano. Existe la posibilidad de que se den cambios bruscos de temperatura entre 15 y 17 grados centígrados hasta 30 ó 32 grados. Se recomienda consultar las predicciones meteorológicas antes de emprender el viaje. A partir de mediados de septiembre las temperaturas empiezan a descender considerablemente, llegando a alcanzar en pleno invierno unos 17 grados centígrados bajo cero. En primavera se produce el deshielo que suele venir acompañado por frecuentes lluvias.