La Comunidad Valenciana es extraordinariamente rica en flora ya que la diversidad de ambientes naturales permite la existencia de unas 3.000 especies. Dominan entre ellas las mediterráneas, pero los ríos y las zonas montañosas frescas albergan especies atlánticas y centroeuropeas: bosques de pino albar y rodeno y quejigares de arce y fresno de flor. Desde el palmito hasta el tejo o la sabina, los bosques de alcornoques, carrascales o pinos pasando por las hierbas aromáticas. En cuanto a los cultivos, cítricos, olivos, almendros, algarrobos, frutales y viñas dibujan un elegante paisaje rural en el que han dejado sus huellas antiguas culturas.
En cuanto a la fauna, más de 100 especies de mariposas, una treintena de anfibios y reptiles y grandes mamíferos como jabalíes, corros o ciervos invitan a los amantes de la naturaleza a la observación. Además, la avifauna es especialmente rica, sobre todo en los humedales costeros, que albergan hasta 250 especies.